Las diferentes evidencias y trascendidos sobre las entrevistas realizadas tanto a Matías Jurado como a su entorno, van arrojando más elementos que permiten establecer el perfil del sujeto acusado de ser un asesino serial en Jujuy.
En este sentido, Constanza Lamarque, abogada y perfiladora criminal, dialogó con Radio 2, brindando su punto de vista y afirmando que desde su óptica, se está ante la presencia de un homicida múltiple, con rasgos psicopáticos, muy meticuloso, que elegía como cazar a sus víctimas y tenía una manera determinada de deshacerse de sus cuerpos.
Todo esto, en un ambiente, analizó, de sentirse en plena confianza con su modus operandi, aportando además que cree que este accionar no es algo que se haya desarrollado en estos últimos meses, ya que vendría desde hace mucho tiempo atrás con las acciones criminales por las que se encuentra acusado.
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La abogada, en base a lo que pudo conocer por diferentes publicaciones periodísticas, comentó que si bien faltan muchos elementos, estima que «estaríamos frente a un asesino serial, porque para que sea asesino serial mínimo se necesitan tres víctimas que estén en eventos separados, en lo que se llama tiempo de enfriamiento. No son todos en el mismo momento, sino que se van dando en el tiempo. También encontramos una motivación interna determinada de esta persona, que por lo poco que se puede ver, lo que busca es poder y control total sobre la vida y la muerte de la víctima. Tiene además un modus operandi y determinado, que es cómo los va a cazar, porque él actúa como un depredador. Básicamente elige a las víctimas que son las más vulnerables, que poca gente va a denunciar, que están en situación de calle, que son hombres mayores de 50 años. Esas son las mayorías. Y después descarta el cuerpo de una manera determinada«.
La perfiladora criminal, analizó además que las personas con rasgos de asesinos seriales, «tienen esta motivación, tienen un modus operandi muy determinado y una victimología muy clara. Descarta el cuerpo también de una manera determinada».
En relación a lo que se pudo determinar, conocer y observar en videos sobre Matías Jurado, la doctora Lamarque dijo que «en este caso lo que me llama mucho la atención es la confianza y la comodidad con la que se mueve. Está todo en su zona de confort, donde caza y dónde llevaría a las víctimas a morir. Y cómo descartaría los cuerpos muy cercanos a su casa. O sea, se nota que es un asesino que está muy confiado«, agregando que «si bien es cierto que un perfilador criminal no puede eh diagnosticar, porque eso le corresponde a las pericias psicológicas y psiquiatras, pero pienso que podríamos estar ante una personalidad con trastorno antisocial y rasgos psicopáticos importantes. Esta clase de personas tienen una lógica determinada que solamente sirve para ellos. Y que además también son muy manipuladores. Se creen superiores a los demás y uno puede ver cómo atraía a las personas a través de la manipulación, de mentiras».
La letrada, incluso fue más allá y sostuvo que «me animo a decir que en realidad estos no fueron sus primeros asesinatos. O sea, se nota que existe un accionar muy meticuloso, mucha organización. Y a mí me da la sensación de que esta persona ha empezado a matar hace mucho tiempo atrás. Por eso habría que ver pedidos de desaparecidos en otras zonas. Es muy raro que una persona escale tan violentamente de un robo armado a esto«.
Además, describió la situación del sobrino de Matías Jurado. «Yo ahí veo también algo que es muy grave. Pobre este adolescente, que vivió en un entorno naturalizado de violencia y que recién a partir del allanamiento pudo hablar. Yo me animaría también a decir de que el tío intentaba entrenarlo porque he escuchado que más o menos le había dicho que si quería conocer un cuerpo o un muerto y mucha sangre, que pase a ver eso. Yo creo que lo que intentaba hacer el tío era hacer esta desensibilización, de este menor a la violencia para que por ahí en un futuro participara también de esto».
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Foto: Constanza Lamarque, abogada y perfiladora criminal.