- Una joven realizó graves acusaciones que surgieron tras una denuncia de abuso sexual.
- Ella haría sido sometida contra su voluntad por un estudiante del Instituto de Seguridad (IUPS).
- Dijo que su causa fue manoseada y encubierta por los organismos que intervinieron.
Una joven realizó graves acusaciones en contra de distintos organismos que intervinieron luego de que ella denunciara a un estudiante del Instituto Universitario Provincial de Seguridad, IUPS, por el grave delito de «abuso sexual con acceso carnal» del que asegura fue víctima.
Pero para la joven, aquella denuncia formulada en el año 2023, no fue el inicio de un camino de Justicia que ella esperaba, sino que por el contrario, como lo relató ante nuestro medio, fue el comienzo de un cambio en su vida, la cual ya no volvió a ser la misma.
Porque aquello, además significó la clausura de su sueño de pertenecer a las fuerzas de seguridad de la provincia, ya que como su presunto agresor sexual, también se encontraba estudiante en el IUPS, donde logró su ingreso con notas sobresalientes, y mientras se mantuvo en la institución, se destacó por sus logros académicos, aseguró.
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Fue también ser víctima de humillaciones y destratos por parte de quienes debían cuidarla y velar por su seguridad y garantizar que el proceso por la grave denuncia de abuso sexual, continuara un trámite adecuado.
Dentro de este grupo de personas que la llevaron a incluso llegar a perder su salud, la joven asegura que hay personal del Instituto Universitario Provincial de Seguridad y miembros del Ministerio Público de la Acusación.
«Yo denuncié a mi abusador, el cual se encuentra estudiando la carrera de policía, la que yo también me encontraba estudiando, pero a mi me sacaron por haber hecho la denuncia», dijo la joven, quien afirmó que «hubo represalias, hubo persecución, hubo corrupción por mi caso de abuso sexual. Se divulgó la denuncia, no hubo privacidad, no se respetó a la víctima. Institucionalmente hubo violencia ejercida hacia a mí y lo encubrieron a él, a pesar de estar imputado. O sea, ya denunciado e imputado, con una perimetral en su contra que nunca se cumplió», asegurando que «los fiscales que estuvieron a cargo de mi causa hicieron investigaciones paralelas para poder salvarlo a él. Hicieron las pericias del celular, tengo entendido, y se comprobó la violación, pero como él está estudiando la carrera de policía le quieren dar una mano».
«Una oficial divulgó mi denuncia»
Recordando todo lo que tuvo que pasar a lo largo de estos años, buscando alguna respuesta sobre el avance de la causa, la joven expresó que «después de un año y medio de buscar a la fiscal, pudimos dar con ella y que nos atienda, porque nadie nos daba ninguna información sobre mi expediente. Nosotros solicitamos en el MPA que nos dieran información de cómo estaba yendo mi causa, sobre que se había presentado», agregando que «en el momento que yo hago la denuncia, el día 3 de julio del 2023, la oficial que me toma la denuncia, en todo momento me cuestionó. Quería poner cosas que ella quería y yo le reclamaba que no era como yo le estaba relatando. Y cuando yo hago la denuncia, esta oficial dice que tiene que ir a avisar al Instituto sobre esta denuncia y que ella consideraba que debían sacarnos a los dos, tanto al imputado como a mi de la carrera, ya que era una denuncia grave. Entonces, ella fue la que divulgó mi denuncia en primer instancia al instituto«.
Sostuvo que «desde ahí empezaron a tener represalia en mi contra académicamente. Me empezaron a hacer perder mesas de exámenes, me empezaron a castigar físicamente haciendo abuso de autoridad porque los instructores me sobre exigían de esfuerzo físico y tengo testigos sobre eso. También me mencionaron, ahí en la institución. Tengo certificados médicos, donde se expresa que me agarró anemia, deshidratación, lumbalgia a causa del sobreesfuerzo físico que me hacían. También, ellos -los superiores del instituto- estaban truncando el proceso de la violación para que yo pueda seguir el proceso penal, porque me atacaban académicamente. Me decían que tenía 24 horas para presentarte con el abogado o si no me darían la baja. Entonces yo quedaba a la deriva, porque no me daban tiempo para ir al psicólogo, no me daban tiempo para presentarme en la justicia».
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Luego de mucho insistir, finalmente el 28 de junio del año 2024 se dictó una medida perimetral a su favor, pero sucedió luego de que ya la habían sacado de la carrera: «se dictó la perimetral, pero nunca se cumplió. Nunca me dieron custodia, nunca me dieron el botón antipánico. Esta persona siguió rompiendo y violando la perimetral y yo realicé las denuncias correspondientes. Y mi causa seguía pasando de fiscal en fiscal y nunca había solución. O sea empezaron a manosear mi causa y tanto toda la policía, todos los fiscales conocían el contenido de mi denuncia y del expediente. Mientras yo como víctima no tenía acceso al expediente».
Entre otra de las graves acusaciones que realizó, indicó que «yo me presenté al estudio médico en dos oportunidades, pero no me lo realizó la doctora ginecóloga, porque yo me encontraba con hemorragia y estuve con hemorragia durante 6 meses en el 2023. Fui a ginecólogo para que me dieran pastillas y no se me cortaba. Entonces, en el 2024, a principio de ese año, yo voy a buscarla a la oficial, porque ya me encontraba mejor, para que me diera el turno médico. Entonces la jefa de esa unidad de violencia de género de Ciudad de Nieva me dijo que la oficial se encontraba de licencia desde el año pasado Y nunca me dieron respuesta dónde podía encontrarla porque ella era la única que tenía el poder de darme un nuevo turno médico o asesorarme sobre mi denuncia. Y según lo que tengo entendido por personal policial, me dijeron que a esta persona, a mi abusador, lo están por sobreseer porque le quieren dar una mano. Le quieren dar una mano y a mí como víctima nunca me dejaron presentar pruebas, porque yo tengo pruebas, tengo capturas donde esta persona se echa la culpa. Y también tengo, lo psicológico que cuando yo hablo sobre el tema, como ya me pasó en el MPA porque a mí me hicieron declarar más de 10 veces, me agarran crisis en donde se me tuercen las articulaciones y me agarra ansiedad. También pierdo el conocimiento. Un psicólogo de un hospital me dijo que supuestamente yo puedo incluso perder la memoria. También me afectó mucho moralmente, porque a mí se me difamó como víctima. No se me dio nunca contención desde la parte académica. Tampoco de parte Estado nunca me brindaron asistencia psicológica, nunca me brindaron abogado que me presente o asesore».
Frente a todo este cuadro, la joven asegura que no le quedan más recursos que hacer visible su caso y solicitó que tanto desde el Estado sobre todo, se tome en serio la denuncia realizada en contra de esta persona que está a poco de egresar del Instituto Universitario Provincial de Seguridad.
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