Este jueves el gobierno de Javier Milei sufrió un nuevo revés en el Senado, que se suma a la sucesión de derrotas acumuladas en todos los terrenos, desde lo electoral a lo parlamentario, pasando por las masivas movilizaciones en las calles y los escándalos de corrupción.
La Cámara de Senadores rechazó el veto presidencial, firmado la semana pasada, a la ley de reparto de fondos a las provincias a través de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN). La votación terminó en 59 votos a favor de defender la ley contra 9 que apoyaron el veto de Milei. Curiosamente, la norma había sido votada por 56 senadores, es decir tres menos de los que ahora la defienden. Hubo tres abstenciones.
El Senado acaba de rechazar el veto de Milei a la ley de los ATN (aportes de las provincias) pic.twitter.com/cE7bDXsa69
— La Izquierda Diario (@izquierdadiario) September 18, 2025
Ahora el proyecto para restituir la ley pasará a la Cámara de Diputados para su votación definitiva.
La votación se produjo luego de que, al inicio de la semana, el Gobierno nacional repartiera $ 12.500 millones entre las provincias de Santa Fe, Entre Ríos, Misiones y Chaco. Milei y Luis “Toto” Caputo buscaban así conseguir votos de esas gobernaciones para evitar el rechazo al veto. Pero les salió muy mal. No los apoyaron ni sus aliados circunstanciales. Apenas quedaron los propios de LLA, intentando resistir lo irresistible.
Esta votación y la sucesión de reveses para el Gobierno de estas semanas es consecuencia de la fuerte resistencia social que se fue generando en los últimos meses, con luchas ya emblemáticas como las de las jubiladas y los jubilados, la de las personas con discapacidad, la del personal de salud del Hospital Garrahan y la de comunidad universitaria.
En el caso de los ATN, que están pautados para asistir a las provincias en emergencias climáticas y desastres ecológicos, diversas organizaciones sociales y ambientales llevan tiempo proponiendo un esquema de mayor transparencia, planificación y criterios ambientales en la asignación de esos fondos.
Es momento de que el ajuste de Milei y Caputo caiga de conjunto. Mientras las diferentes alas del peronismo se entusiasman pasivamente con “esperar a 2027” (una reminiscencia al “hay 2019” con el que desmovilizaron las luchas contra el gobierno de Mauricio Macri), desde el Frente de Izquierda y sectores en lucha plantean que de lo que se trata es de imponerles a las conducciones de la CGT y las CTA un verdadero paro nacional que dé inicio a un plan de lucha que avance hacia una huelga general política que permita derrotar todo el plan del Gobierno, el FMI y el empresariado nacional y multinacional.