La cronología de un desastre que podría haberse evitado:
El pasado 18 de febrero, se registraron fuertes lluvias y por desmoronamientos en uno de sus bordes se cortó el puente en barrio Los Huaicos.
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Los residentes del sector criticaron duramente la falta de obras e inacción municipal y gubernamental ante la falta de defensas que contengan las crecidas del Río Grande.
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La misma situación se repitió casi un mes después, incluso con mayor gravedad.
El último sábado 8 de marzo, se desató una severa tormenta que desmoronó todo un tramo intermedio del puente ubicado sobre la Avenida Bolivia, a la altura del Arroyo Burrumayo.
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Y no fue el único… Idéntico caso se dio en el Puente Los Molinos que también colapsó por las precipitaciones.
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El puente de Huaico fue habilitado nuevamente con trabajos precarios mientras que el puente de Los Molinos restablecer el paso “llevará un par de días” según el propio gobernador Carlos Sadir.
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Temor y preocupación en los vecinos
Toda la situación vivida generó sumo temor en los residentes del sector capitalino quienes reiteraron que no es la primera vez que sucede un hecho de este tipo y que urgen obras reales de encauce de río y mejora de defensas para no volver a vivir estos problemas.
“El sábado vivimos una situación porque el río creció bastante, mucha agua, se llevó parte del fondo y se comió prácticamente todo. Estamos preocupados por eso, pedimos que envíen maquinaria, que encaucen el río, obras de defensa porque no vino nadie acá. El caudal de río arrastró árbol, era muy feo lo que se vivió”.
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“Lo de siempre, la vez pasada vinieron y ahora volvieron y sigue igual, peor con la cantidad de agua que cayó. Sin agua, sin luz, es un barrio prácticamente abandonado. Desde donde estamos hasta el acceso al puente somos como 25 familias, todas en la misma situación”, relataron vecinos de Huaico Chico.
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