El dólar blue se recalentó en el comienzo de la semana y subió con fuerza, para cerrar este martes en $1.285, su mayor valor en seis meses. En tanto, los dólares financieros, el Contado con Liquidación y el MEP, también acentuaron la tendencia alcista, en un escenario en el cual persiste la incertidumbre sobre los tiempos y las condiciones del acuerdo con el FMI, a lo que se suma un contexto internacional también inestable.
En este clima, también siguieron subiendo los futuros del dólar, y en Aurum Valores remarcaron que «crece la divergencia entre el dólar esperado en Rofex y la tablita que se deriva del crawling que sostiene el Gobierno». En la plaza de futuros el dólar para noviembre cerró en $1.359 y para diciembre en $1.390 ante las expectativas de modificaciones, el esquema cambiario luego de las elecciones.
Los analistas esperan que los dólares muestren volatilidad en los próximos días, a la espera de la definición si el Congreso aprueba o rechaza el DNU que envió hace una semana el Poder Ejecutivo para obtener su apoyo en el acuerdo con el FMI. El oficialismo solicitó una sesión especial para el miércoles para tratar el DNU en la Cámara de Diputados.
Los especialistas remarcan que el foco del mercado en la semana estará puesto no solo en el acuerdo del FMI sino también en la evolución de las reservas y las intervenciones del BCRA en el mercado de cambios, luego de que el viernes la entidad monetaria dado que la entidad monetaria vendió u$s474 millones, el segundo rojo más alto en la era Milei, el lunes volvió a vender u$s56 millones y este martes otros u$s215 millones. Así, el stock de reservas brutas se ubica en u$s27.206 millones, el nivel más bajo desde fin de septiembre de 2024.
Dólares paralelos: las causas de la mayor tensión
En el segmento bursátil, el dólar contado con liquidación (CCL) subió este martes un 3,5% a $1.301 (+3,5%), mientras que el dólar MEP trepó 3,5% $1.299. Son los valores más altos desde mediados septiembre del 2024.
Gustavo Quintana, operador de Pr Cambios, adjudicó la mayor presión alcista, tanto del dólar blue, como de las divisas financieras, a que «las causas aparentes que justificaron el revuelo del viernes estarían vinculadas con cierre de posiciones en los mercados de futuros como consecuencia de rumores sobre un cambio en la política cambiaria que supuestamente iba a abandonar el crawling del 1%».
«El blue y los dólares financieros rebotan como consecuencia de lo anterior, como un efecto colateral«, aseguró.
En sintonía, el analista financiero Christian Buteler planteó: «Sorprendió lo que pasó el viernes que se triplicó el volumen de operaciones en el mercado cambiario oficial y que el BCRA tuvo que vender u$s474 millones para abastecer la demanda, eso prendió las luces amarillas, y se vio también en el mercado de futuros. Y no hubo una explicación oficial. Es lógico que el mercado siga nervioso hasta ver lo que pasa y que los dólares suban. El movimiento que vimos el lunes se debe a lo que pasó el viernes».
«Cuando tenés estos movimientos el carry trade se pone en pausa, el que estaba pensando en salir quizás apura en cerrar posición, que es lo que ves en el dólar futuro. Cuando ves que crece el dólar futuro es que están cerrando las posiciones, aseguras el dólar a cierta fecha, por si se llega a escapar ya tener cerrada la posición», explicó.
Pablo Repetto, jefe de Research de Aurum Valores, consideró que la suba de los dólares alternativos «está relacionado con la posibilidad de cerrar un acuerdo con el FMI». Y es que sostuvo que «ese acuerdo claramente va a traer modificaciones al esquema cambiario tal como lo anticipó el ministro Caputo y como lo dejó traslucir Milei al hablar de que va a haber más volatilidad, y en este contexto es que en el mercado se está buscando tácticamente opciones de cobertura».
Pablo Lazzatti, CEO de Insider Finance, afirmó que «el alza de los dólares estos días se debe a que todavía faltan definiciones del FMI sobre el potencial acuerdo con Argentina».
«Además, se agrega que la inflación de febrero de 2,4% está duplicando el ritmo de crawling peg mensual, lo que empuja la cotización de los dólares paralelos«, destacó
Por su parte, Joaquín Marque, director de UG Valores, aseveró que «la volatilidad en los dólares financieros tiene diferentes causas: inicio de procesos electorales, incertidumbre sobre la letra chica del acuerdo con el fondo, dificultad para acumular reservas y además los movimientos en los mercados internacionales»
Asimismo, la economista Natalia Motyl, dijo que hay «una serie de factores tanto locales como internacionales están ejerciendo una presión alcista sobre los dólares financieros y el dólar blue».
«Desde el ámbito local, la incertidumbre en torno al acuerdo con el FMI es un factor determinante. Existen múltiples interrogantes sobre la validez del DNU, si será aprobado o rechazado.»Asimismo, la postura del FMI respecto a las exigencias que plantea a la Argentina sigue siendo una incógnita clave Entre los puntos más relevantes se encuentran si los desembolsos acordados contribuirán efectivamente a engrosar las reservas del BCRA o si serán utilizados para intervenir en el mercado cambiario. Esta falta de certezas genera tensiones en el mercado financiero, alimentando la volatilidad en la cotización de los tipos de cambio paralelos», aseguró.
Motyl subrayó que «a esto se suma el impacto de los recientes conflictos políticos y sociales: los disturbios tanto en las calles como dentro del Congreso han incrementado la percepción de riesgo en los inversores, afectando la demanda de pesos en el corto plazo, y en contextos de incertidumbre, los agentes económicos suelen buscar refugio en activos dolarizados, contribuyendo a una mayor presión sobre la cotización del dólar».
«Desde la perspectiva internacional, la coyuntura también es adversa. Las crecientes políticas proteccionistas en Estados Unidos y la amenaza de una desaceleración económica global están incentivando una reconfiguración de los flujos de capital. Se observa una salida de fondos desde economías emergentes hacia activos más seguros, lo que genera presiones no solo en Argentina, sino en toda la región», esgrimió.
Dólares: ¿qué valor esperan para la segunda quincena del mes?
Quintana evaluó que «el rumbo de los dólares en la segunda quincena aparece ahora con pronóstico reservado, toda vez que no se han disipado por completo los rumores antes mencionados»
«La volatilidad será seguramente el condimento que exhibirán las cotizaciones en ese lapso. La aprobación o no del DNU no creo que impacte, lo que puede impactar es la difusión del acuerdo con el FMI. No veo una disparada del dólar, sí un reacomodamiento, producto de la incertidumbre», auguró.
El analista financiero Gustavo Ber comentó que el blue, los dólares financieros «se estuvieron reacomodando al alza a partir de una mayor búsqueda de cobertura -reflejada al contado y en los futuros – por parte de algunos operadores, que se origina por el incierto clima externo así como por la expectativa que despierta conocer los detalles sobre los eventuales lineamientos para el régimen monetario y cambiario que pudieran llegar a acordarse en este nuevo acuerdo con el FMI».
Ber dijo que «no creo que exista riesgo de sobresaltos en el mercado cambiario, ya que de fondo continúa prevaleciendo un clima de confianza respecto a los progresos económicos».
En ese marco, el experto estimó que el blue y las divisas financieras «para la segunda quincena, podrían oscilar entre los $ 1.250 y $1.280 de aprobarse el DNU», mientras que calculo que «de rechazarse, lo cual no parece actualmente el escenario probable, los dólares podrían avanzar hacia zona de los $ 1.350″.
Para el economista Federico Glustein, en los próximos días «los aumentos de las divisas van a continuar, porque todavía no hay definiciones sobre el FMI, además de que economistas cercanos al Gobierno vienen hablando de flotación cambiaria y obviamente genera necesidad de protección y una dolarización leve».
«Hasta el acuerdo con el FMI habrá tensión en los tipos de cambio, marcando hacia el alza y con un rango mayor al esperado, entre $1.220 y $1300, una barrera psicológica que se podría pasar si el DNU no se aprueba y no hay acuerdo con el FMI. Si se llega a acordar, podríamos retornar a los $1.220 o incluso menos», pronosticó.
Lazzati proyectó que «si el DNU avanza en el Congreso, las cotizaciones deberían comprimir en $1.180-$1.200, y en caso de que sea rechazado, los dólares financieros deberían converger hacia $1.260-$1.280 hasta que se anuncie algún driver que vuelva a anclarlo».
Por su parte, Motyl, dijo que «el mercado parece haber encontrado un cierto punto de estabilidad tras la decisión de Donald Trump de no avanzar con nuevos aranceles, lo que ha reducido la incertidumbre global, aunque la situación sigue siendo altamente volátil y se espera que la fluctuación en el mercado cambiario persista».
En cuanto al plano local, la economista prevé que «si el DNU es aprobado, es probable que los dólares financieros se estabilicen en torno a los $1.200, y si es rechazado, podríamos ver valores más cercanos a los $1.300″.
A su vez, Buteler alertó que «si esto es el comienzo del desarme del carry trade, se va poner ‘heavy’, porque uno esperaba que esto pudiese pasar más para cerca de las elecciones».
«El rumbo de los dólares va a depender de si el BCRA sigue vendiendo o no divisas, si cierran posiciones de carry para salir de pesos y posicionarse en dólares, si se aprueba o rechaza el DNU, y la letra del acuerdo con el FMI», concluyó.
¿Hay riesgo de una disparada del dólar?
Caputo afirmó días atrás que no hay pesos para alimentar una corrida de los dólares. No obstante, los analistas advierten sobre la gran cantidad de pesos existentes que pueden tensionar a los dólares.
Un reciente informe de EconViews resaltó que «si el dólar llegara a dispararse, no sería la primera vez que lo hace con pocos pesos en circulación». Y acotó:»Basta recordar el 2001, cuando el dólar se escapó en medio del corralito, sin disponibilidad de pesos. Lo único que hace falta es que la demanda de dólares supere a la oferta».
«Si en algún momento aparece nerviosismo —por las elecciones, por un programa con el FMI que no traiga tantos dólares como se espera, o por un cisne negro—, el BCRA enfrentará una situación en la que los pesos sobrarán. No hay que olvidar que los depósitos, las Lecaps, los money markets y otros instrumentos financieros en pesos pueden volcarse rápidamente a la compra de dólares», advirtió.
A su vez, Buteler aseveró que «pesos sobran, lo que falta son dólares y por eso se va al FMI a pedir más plata».
«Hay pesos en plazos fijos que tienen las empresas, en deuda de la moneda local. Encima están concentrando vencimientos a corto plazo en las últimas licitaciones. Hay pesos para que te puedan correr sobre el tipo de cambio», fundamentó.
Marque concordó que «si bien el equipo económico, asegura que no hay pesos para iniciar una corrida, aún existen grandes posiciones en títulos del sector privado que se pueden reducir».
Por su parte, Repetto juzgó que «lo de que no hay pesos para alimentar corrida es relativo; depende de si el esquema sigue teniendo un cepo extremadamente rígido o no».
«Decir que lo único que puede correr es la Base Monetaria Amplia parece más una estrategia comunicacional que una definición económica», agregó.